viernes, 12 de junio de 2020
Capítulo 7
Calisto y Jorge se parten la boca con desesperacion. Luego Jorge le arranca a Calisto la camisa casi a mordiscos a la vez que le va devorando el pecho. Le muerde los pezones. Calisto le estira del pelo. Los dos se retuercen del placer. Luego Jorge se arrodilla ante él y le empieza a desabrochar los pantalones. No lleva los boxers asi que enseguida la dura lanza de Calisto aparece. Jorge le da pequeños lenguetazos. Calisto gime con una desesperada pasión. Los dos se desean. Aunque no tiene intencion de pararlo, Calisto jadea:
--esto esta mal, lo sabes... mañana me voy a arrepentir.
Con una salvaje pasion, Jorge va masturbando a Calisto. El arma de éste esta ya enorme.
--pero hoy los dos lo queremos y lo necesitamos.
Jorge se traga el miembro viril de Calisto. Calisto se lo saca de la boca, juega con él. Lo va moviendo para que no lo alcance. Se lo pase por la cara a Jorge. Se va moviendo coqueto. Eso "molesta" a Jorge que a la que puede agarrar de nuevo ese verga que tanto le gusta. Se la traga de nuevo entera y ya no la suelta ni para respirar. Calisto siente los dientes de Jorge que se le clavan en su parte más sensible. Le duele pero le fascina. Se venga estirando del pelo a Jorge. Los dos están locos por la pasion. De pronto Jorge se para en seco. Se levanta. Los dos se miran. Sienten que se mueren si no están el uno con el otro. Jorge lo mira con cara de depravado mientras que muy lentamente se va sacando la camisa y se va desabrochando los pantalones. Uno a uno se va desbrochando los botones de la cremallera. A los dos les fascina hacer perder la paciencia al otro. Los jeans de Calisto le han quedado hasta la rodillas. Entonces éste se saca los zapatos y los jeans. Totalmente desnudo y ebrio de deseo va hacia Jorge que con mirada muy sensual va desabrochandose los botones de la cremallera. Calisto va hacia esa zona pero Jorge le va haciendo que no divertido. Calisto le da un golpe en la mano y Jorge las levanta como si se rindiera entonces rápidamente Calisto le baja los pantalones. El rabo de Jorge está enorme tambien. Calisto lo desea tanto. Deseaba tanto tener esa parte de nuevo para él. Ahora que ya es un hecho y aunque está loco por saborearla de nuevo quiere disfrutar el momento. Sin bajarle el boxer la acaricia, la muerde. Chupa los huevazos. Jorge, gimiendo de gozo, le aprieta la cabeza contra sus genitales. Casi lo ahoga. Un ahogamiento de placer. Jorge lo libera con una sonrisa. Calisto mete su mano en el boxers masturbándolo. Luego saca la cabecita de Jorgito por el lado del boxers y le da un buen mordisquito. Jorge grita en una mezcla de dolor y placer. Los dos amantes han explorado sus cuerpos por años. Han aprendido junto y demuestran que pese haber conocido otros cuerpos siguen recordando exactamente lo que más vuelve loco a esa persona. Y Calisto finalmente decide bajar el boxers de Jorge que este queda a las rodillas y al fin quedan los genitales de Jorge maravillosamente al descubierto. De rodillas y ante esa bella arma que tanto desea pero Jorge se la agarra y travieso no permite que Calisto la introduzca en su boca. Se la lleva hacia su cuerpo, la cubre con las dos manos. Deja libre sus dos testiculos invitando a Calisto a jugar con ellos. Y Calisto vaya si lo hace. Los chupa con cariño. Los acaricia. Los besa. Poco a poco va siendo mas agresivo. Le da pequeños mordisquillos y finalmente los estruja a ambos bien fuerte entre sus manos. A Jorge le goza por el dolor que siente. Calisto aprieta con fuerza como si fuera rebentarlos hasta que ya Jorge no aguanta más y libera su rabo. Los amantes se lanzan miradas de complicidad. Los dos disfrutan por la manera en la que el otro lo trata, con las cosas que le hace. Jorge igualmente no permite que Calisto alcance el deseado premio. Con la mano en la cabeza de Calisto lo mantiene alejado de su verga y es Jorge quien se va acercando. Se lo mete primero la punta y disfruta viendo la desesperacion de Calisto por chupársela. Se la deja en la cara pero donde no puede tocarla y goza con su "sufrimiento". Repite esto varias veces. Luego es el quien lo introduce con mucha fuerza hasta el final y es quien dirige la cabeza de Calisto. No permite que descanse. No permite que respire. Lo obliga a que se la trague entera. Hasta la garganta. Cuando ya se han martirizado suficiente y ya no pueden mas y necesitan descargar, Jorge da un empujon a Calisto que es el que en ese momento está de rodillas y lo tira al piso. Jorge le clava la lanza de Calisto aullando de placer. Es Jorge el que domina. Calisto se queda quieto con los ojos cerrados y disfrutando. Cuando Jorge explota, Calisto sin darle tiempo al otro a recuperarse se clava en él con una apasionada agresividad. Lo parte de gusto con su lanza. Calisto golpea con brutal placer a Jorge que grita de dolor y gusto. Calisto es un volcan que tarda en entrar en erupcion. Lo hace con un grito que hace retumbar la noche. Luego los dos se retuercen de placer. Calisto cae al lado de su amante retorciendose de placer. Resopla:
--¡¡ha sido la mejor noche de mi vida, la mejor¡
Calisto no le dice nada. Sabe que eso de Jorge ya es mucho y le duele pensar que Jorge siente cosas por él y que no lo puede corresponder porque está Antonio. No dice nada. Se queda a su lado. Los dos acariciándose la mano. Mirándose contentos. Siente como si no hubiera pasando el tiempo y fueran esos jovenes de 20 pocos que disfrutan de sus cuerpos sin pensar en el mañana. A su modo se querian. Jorge quisiera recuperar todo eso. Quisiera decirle sé que fui yo quien la rego ¿volvemos? pero le da demasiado miedo el rechazo. Le da miedo pensar en confesar que no lo ha olvidado y que Calisto le salga con que ama a Antonio, que lo olvido a él, que lo de esa noche ha sido un desahogo. Jorge se queda dormido confiado en brazos de Calisto. Lo hacían antes siempre. A los dos les gustaba amanecer juntos y aunque no han habido promesas Jorge quiere pensar que todo sigue como antes. Calisto está feliz. No puede sentirse culpable de lo que ha pasado porque hacia años que no se sentia tan vivo. Le duele Antonio. Lo que si le duele es lo que va a hacer porque siente que Jorge no se lo merece.
--lo siento pero cuando rompimos todo se acabó. Gracias por hacerme vivir esa noche magica.
Los ojos de Calisto se llenan de lagrimas. Ve a Jorge dormido desnudo, tan tranquilo que lo que le provoca es cerrar los ojos, olvidarse de todo y quedarse a su lado. Le pone un jersei encima para que no tenga frio. Se viste en silencio y se va sin mirar atras. Cuando baja la montaña ya lo está esperando el taxi que ha llamado. MIra hacia la montaña, triste al dejar ahí al hombre que mas ha querido en su vida. Aunque le dolería pensar que es así confía, aunque solo en parte, que para Jorge haya sido sólo una noche de sexo y lo pueda olvidar. Pero en realidad esta seguro que no ha sido solo sexo.
Calisto llega al apartamento de Antonio con cara de culpa. Quisiera que éste lo dejara y así fuera libre para Jorge. Tambien espera que Antonio esté dormido porque no se atreve a enfrentarse a él con la culpa que tiene en la mirada. Entra sigilosamente para no despertar a Antonio pero éste lo esta esperando en el sofá. Calisto se muestra serio. No se atreve a mirarlo a los ojos. Antonio siente que es culpa de lo que ha pasado. Se levanta triste.
--Calisto...
Su voz suena dulce y a Calisto le sabe mal. No se atreve a mirarlo a los ojos.
--mejor hablamos en otro momento.
Calisto quiere irse porque no se siente digno de lo que le pueda decir Antonio. Hubiera preferido encontrarlo aun muy enojado. Antonio le agarra la mano. Es muy dulce con el.
--perdoname.
Le tiembla la voz. No es muy de pedir perdón. Ese perdon se le clava a Calisto en las entrañas. con la voz rota le dice:
--No lo digas... no sigas.
Calisto está muy atormentado. Sabe que Antonio se está humillando y que no es justo. Trata de impedir que siga pero Antonio siente que esta perdiendo a Calisto por sus celos.
--te quiero, Calisto.
Calisto no puede evitar que se le salgan las lagrimas.
--No me hagas esto, por favor --solloza Calisto.
Pero Antonio no está dispuesto a perder a Calisto. Éste siente que más que nunca no lo puede dejar y en agradecimiento a lo que le esta diciendo es que dice:
dejaré la obra.
--¿¿que?¿vas a dejar tu sueño por mi?
Antonio está sorprendido pero a la vez emocionado. Y Calisto piensa en Jorge desnudo durmiendo solo y que quisiera estar con él pero no le puede hacer esto a Antonio. No lo puede dejar. Siente que se tiene que alejar de Jorge y dejando la obra es la mejor manera. Antonio le quiere demostrar que está dispuesto a cambiar por el bien de la relación.
--No quiero que deje la obra. He entendido que me amas y nunca me serias infiel.
Calisto se siente como una basura...
--¿hablas en serio? No, mejor dejo la obra.
--¿¿porque vas a dejar la obra?¿es que hay algo que no sepa?
Antonio esta siendo muy dulce pero ahora de nuevo los celos lo empiezan a atormentan. Calisto, aunque se siente muy culpable, cree que lo va a lastimar más si lo engaña.
--No, no es eso.
Antonio lo abraza:
--¡¡pues no se hable más¡
Antonio besa apasionadamente a Calisto, quiere sellar su reconcilacion en la cama y, aunque a Calisto lo que menos le apetece en esos momentos es acostarse con él, está decidido a olvidarse a Jorge y ser feliz con Antonio. Se deja arrastrar hacia la cama. Antonio lo nota en baja forma. Supone que ha estado caminando y esta demasiado cansado. No dice nada. Calisto tampoco. Se queda desnudo en la cama y deja que Antonio le haga lo que quiere pero Calisto cierra los ojos y piensa en Jorge. Antonio lo besa y Calisto piensa en Jorge. Es Antonio quien lo esta acariciando en cambio son las caricias de Jorge las que esta sintiendo. Antonio entra en él con un calido amor y una deliciosa pasión y en cambio Calisto se estremece recordando las sensaciones de cuando Jorge lo estaba haciendo suyo tan salvajemente. Calisto se hace en seguida el dormido pero llora por dentro. Antonio lo acaricia. Lo acaricia con ternura. Calisto nunca se habia dado cuenta de lo amoroso que es su chico cuando él duerme.
--Estoy tan enamorado de ti, sé que no te lo demuestro pero no te puedo a perder. Voy a ser la pareja que esperas.
A Calisto le atormentan esas palabras. Antonio se fuma un cigarrito y se queda dormido en seguida bien contento. Calisto se levanta con cuidado de no despertarlo y lo mira mientras duerme.
--perdon, perdóname.
Va hacia la ventana. Trata de divisar la montaña en la que esta Jorge pero no se distingue. Ahora él es parte de esa ciudad que tenían dominada los dos amantes. Se le escapa unas lágrimas.
--Lo nuestro ya no puede ser. Nos reencontramos tarde.
Y le duele tener que renunciar a Jorge pero tampoco Jorge le ofrece nada y Antonio está dispuesto a todo por el. Calisto mira a Antonio y dice:
--te voy a ser feliz. Lo juro.
Luego se vuelve a tumbar en la cama. Se refugia en él para tratar de no pensar en Jorge pero el rostro de él se le repite una y otra vez. Finalmente se acaba durmiendo.
Jorge despierta tirado en la arena con los primeros rayos del sol. Está solo. Se levanta feliz. Siente como si no hubiera pasado el tiempo y abre los ojos como tantas otras veces lo hizo por años y ahí estaba Calisto. Eran dos jóvenes locos. Los mejores amigos del mundo, se querian y les encanta fornicarse el uno al otro. Toca con su mano. Espera encontrarlo a Calisto y le decepciona que no esté.
--¿¿¿Calisto?
Su voz retumba en el vacio. Están solos él y la naturaleza. Se resiste a creer que Calisto lo haya dejado solo luego de hacer el amor como nunca pero así es. Una lágrima aparece por su mejilla.
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